¿Quebrando a Telefónica?

Mucha incertidumbre ha generado el actuar de la Cofetel en torno a la resolución que concluye desacuerdo de Interconexión entre Axtel y Telefónica Movistar. Esta resolución reduce 58 por ciento lo que Telefónica puede cobrar a Axtel por terminar llamadas de ésta en su red móvil y hace la decisión retroactiva al 2008.

La decisión es benéfica para todos los operadores de telefonía fija (Axtel, Maxcom, Telmex y los cableros). No beneficia a los usuarios, pues hasta ahora estos "ahorros" no han sido repercutidos por Axtel vía una baja en tarifas. Un detalle que el regulador pareciera omitió en su análisis. Sin embargo, sí hay importantes repercusiones para toda la industria de las telecomunicaciones y para las autoridades:

1.- Una vez más queda en entredicho la autonomía de la Cofetel, pues acepta como validas resoluciones de la SCT, en este caso del 2007. A la par de que pierde seriedad la Cofetel al estar aprobando asuntos que sin mayor discusión se insertan a los asuntos a ser tratados por el Pleno con apenas unas horas de antelación. Y con una votación a favor, de nueva cuenta, de sólo 2 de los 5 comisionados.

2.- La inseguridad jurídica que esta decisión causa, pues parece no aceptar que este mismo sexenio la Cofetel, entonces liderada por Héctor Osuna, ya había tomado decisiones sobre el tema.

3.- Los litigios e inconsistencias regulatorias continuarán. De hecho, Iusacell ya ganó juicios para que las decisiones de la SCT -que ahora retoma la Cofetel- queden sin efecto; mientras tanto, a Telefónica si le aplicarán.

4.- Una vez más Cofetel se aparta de las mejores prácticas regulatorias, pues ni siquiera dio audiencia a las partes, además de que resolvió de manera expedita, copiando textualmente resoluciones impugnadas de la SCT.

5.- A lo largo de la presente Administración, desde la SCT y Presidencia se ha intentado favorecer en este tema a Axtel. A grado tal, que incluso se buscó hace unos meses que, vía el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, se inhabilitase por desacato, en este mismo tema, al entonces presidente de la Cofetel, Héctor Osuna.

6.- Si bien se ve favorecida Axtel en montos aún no cuantificados por Telefónica, pero estimados en 300 millones de pesos, el verdadero ganador será Telmex, que argumentando un trato "no discriminatorio" solicitará que Telefónica le regrese alrededor de 2 mil 500 millones de pesos. Situación que podría llevar a la quiebra a Telefónica.

7.- Siempre es riesgoso que la autoridad tome decisiones retroactivas, y más cuando implica bajas tan severas en los intercambios económicos entre empresas (reducción del 58 por ciento en costos de Interconexión). El efecto de estas políticas podría ser el anular la escasa competencia que existe en el sector telecomunicaciones. Sólo Telcel y Telmex pueden tolerar estos vaivenes económicos tan drásticos, mientras las demás empresas tendrían que resistir con grandes esfuerzos legales o de plano convertirse en económicamente inviables.

8.- Dado que la decisión es inspiración, desde el 2007, del hoy comisionado Rafael del Villar, pareciera que el presidente de la Cofetel, Mony de Swaan, ha puesto en marcha una estrategia para ceder espacios de decisión a los comisionados Del Villar y Martínez Pous.

9.- Continuarán los litigios ad infinitum en el sector y el Plan Técnico Fundamental de Interconexión, tan necesario para estos temas, parece ser que estaría en sus últimos días de existencia, dadas decisiones judiciales.

10.- Para operar en el sector de las telecomunicaciones mexicanas se requiere una batería de abogados dispuestos a hacer cualquier cosa. Y desde luego que el entorno regulatorio continúa siendo poco favorable para atraer inversión extranjera a México.