El último campo de batalla en el que ha entrado la informática es el de la computación cuántica. IBM, Google, Microsoft e Intel luchan por dar con el Santo Grial de la que promete ser la próxima gran revolución en el procesamiento de datos. La relevancia social viene dada por los usos que pueda tener; la inteligencia artificial, la medicina, la química o la logística pueden beneficiarse de estos avances.